Irrumpes bajo mi camisa
Mi pecho sudado se refresca
me envuelves
Amo tu sudor sobre el mío
Demonio de mi alma
Este día caluroso mi mente solo puede pensar en ti
Aroma, deseo, mi vientre y el recelo
Tendré mas noches como estas me repito mientras cedo el control
la boca deja escapar un sonido desesperado
Ruego sentirte
plegaria insolente para seres nocturnos
La obscuridad no basta para esconder las ganas,
noche de telarañas a la vuelta de la esquina
el rincón de la cama
la invasión física
entonces el temblor
la catarsis...
desdobla
puedo olerte
casi puedo tocarte
sal mojada en el cuerpo
Donde te encuentro, donde te pierdo, donde me calmas, donde, donde, donde
esta sed que no para y el sol seca todo
me perteneces para siempre
Demonio de mi corazón, la brisa de verano te trae hasta mí aunque no lo quieras
Que rico sudas.
